Cruella es una película de “comedia” dirigida por Craig Gillespie y protagonizada por Emma Stone.
Tú ya debes saber de qué va…
Los antecedentes de la “potencial asesina de cachorritos” de Disney.
Cruella de Vil.
(La pesadilla de todo niño).
¿No la recuerdas?
Bueno… ha pasado mucho tiempo desde la versión animada de 101 Dálmatas y su live action.
Así que es prudente preguntar…
¿Valía la pena que Disney reviviera a su villana más fumadora?
Sí.
Y menos mal.
Te lo diré de una vez…
Cruella es una película divertidísima.
Presume un ritmo endiablado y expone su “guerra femenina” con un sentido del humor irreverente.
(Aprende, Shiva Baby).
No es para menos…
Disney volvió a contratar al cineasta “contender” de Yo, Tonya.
Y -precisamente- este filme retoma ciertos elementos de aquella premiada obra:
- La narración de la propia protagonista (así como sus explicaciones y justificación).
- Y esa construcción de un personaje mujer tan complejo, cuya moral no está del todo clara.
Y es que, Emma Stone deja espacio para la imaginación…
Emma Stone se pone el abrigo de Cruella
La actriz norteamericana es buena para ser mala.
Me encantó que, bajo sus dos identidades, consiguiera generar empatía y mantener esa malicia que le valió una nominación al Óscar por La Favorita.
Aún así… ese no es el plato fuerte.
Lo que más me impresionó es que interpreta otras cuatro facetas dentro de su dualidad:
- Hija.
- Aprendiz.
- Ladrona.
- Y… Cruella.
Cuatro personalidades muy diferentes entre sí, pero encaradas con total coherencia.
La música de Cruella
El ritmo tan virulento del filme, se debe -en gran medida- a la banda sonora.
Suenan éxitos de los sesenta y setenta sin cesar.
Nancy Sinatra. Electric Light Orchestra. The Doors. The Beatles.
Todos están aquí.
Y se disfrutan al máximo.
Están dispuestos a la perfección para sus escenas correspondientes.
Además, de que se combinan hermosamente con las composiciones de Nicholas Britell.
¡OJO!
Es inevitable pensar que tanta música palpitante fue un recurso fácil de Disney para emocionar a sus espectadores.
Sin embargo, también nos conecta con un punto muy interesante…
Cruella y la cultura popular
No es una coincidencia que la mayoría de las canciones sean de rock.
El personaje principal está totalmente alineado con los movimientos contraculturales de su época.
Cruella es rebelde, escandalosa, agresiva, atrevida y transgresora.
Y esto se opone rotundamente con los valores conservadores de su antagonista.
Por lo que, el conflicto entre ellas, sirve como una metáfora de las disputas generacionales de esa segunda mitad del siglo XX.
¡Además! La moda propuesta por nuestra protagonista está influida por el punk.
Los pecados de Cruella
Ahora sí… el momento de la verdad…
¿Cuáles son los problemas de esta película?
Por un lado, Emma Thompson:
¡No me malinterpretes!
Me fascinó su actuación.
Es una villana exquisita.
Aunque, su personaje me pareció “un clon” de Meryl Streep en El Diablo Viste a la Moda.
Y eso le quita impacto.
Pero, esto es una nimiedad…
Lo peor de Cruella (Spoiler)
Lo que verdaderamente decepciona de Cruella es que Disney cayó en la tentación de volverla un culebrón.
¿Y para qué?
Fue una resolución de mal gusto.
Conclusión
De todas formas, sabes que me gustó este filme y te lo recomiendo.
También le destaco:
- Su sentido del humor, especialmente para las mascotas y con el personaje de Horacio.
- Obviamente el vestuario, maquillaje y la dirección de arte.
- Y las escenografías: ¡esa recreación de la Londres de los setenta!
¿Cómo la resumiría en una sola oración?
“Cruella es una maravilla”.
Responde en los comentarios: ¿cuál fue tu personaje favorito? 🤔
Belén dice
Sebastián no he visto Cruela, pero la quiero ver después de leer tu crítica. Gracias!!